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Educación en Movimiento

PANORAMA DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR  EN MÉXICO

(Segunda Parte)

Dr. Jorge Pérez Mejía

A continuación reproducimos la segunda parte de la entrevista realizada al Senador Juan Carlos Romero Hicks Presidente de la Comisión de Educación del Senado de la República por Ana Beatriz Pérez Díaz publicada en el Semanario LAISUM coordinado por la investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana, Angélica Buendía, colega y miembro del Consejo Mexicano de Investigación Educativa.

En relación a esquemas de financiamiento, algunos académicos como Javier Mendoza han propuesto esquemas multianuales de financiamiento, ¿cuál es su visión al respecto?

Estoy de acuerdo en una visión estratégica en proyectos que tengan esa necesidad porque es un acertijo de incertidumbre el estar año con año con los mismos aspectos y después se quede truncado un proyecto. Debe haber por lo menos visiones de cinco años en algunos manejos de temas; por ejemplo, cuando las universidades están involucradas en temas estratégicos como nuevas enfermedades, energía, agua, cambio climático y biodiversidad, Estado de derecho, desastres naturales, innovación y competitividad, pobreza, marginalidad, desarrollo comunitario, violencia, y la lista puede seguir.

Una de las críticas que se han hecho desde la investigación es que los esquemas actuales de financiamiento para las universidades públicas han desatado brechas de desigualdad en el acceso al presupuesto, ¿qué se tendría que hacer al respecto?

Se está revisado el sistema de evaluación externa para saber cuáles van a ser los indicadores cuantitativos, cualitativos, que siempre serán discutibles, pero que la educación sea más trasparente y que las universidades estén cada vez más dispuestas a tener evaluaciones externas y que se conozcan los criterios de discusión y decisión para esas asignaciones porque todavía tenemos el fenómeno de las cajas negras. Como no hay una Ley, no hay espacios normativos para regular el financiamiento, al final del día son discrecionales y pueden tener tentaciones de sesgos o faltas de fundamentación.

¿Cómo se pueden fortalecer los esquemas de transparencia y rendición de cuentas en las universidades públicas mexicanas?

Se empieza porque casi todo lo que se hace en la vida universitaria, todas las que tienen financiamiento público, están en el espectro abierto, que se conozcan las evaluaciones, los estados financieros, los presupuestos, los dictámenes de auditoría en los diferentes regímenes, por involucrar personas de la sociedad, por ejemplo, como un Consejo Social o patronato de la propia universidad, hablo de las públicas autónomas, que se abran porque la autonomía no es autarquía, la autonomía no es aislamiento, la autonomía es un derecho de los universitarios, un deber del estado y una obligación que se hace con responsabilidad y libertad todos los días por parte de las comunidades, eso ya se ha madurado. Hace treinta años era muy difícil aceptar que hubiera una evaluación externa a las universidades, o que estas publicaran sus presupuestos, sus estados financieros, sus auditorías; todo eso ayuda muchísimo.

¿Cuáles fueron sus aprendizajes siendo rector de la Universidad de Guanajuato?

Son muchos, primero el respeto a los principios esenciales de la universidad, su libertad académica. La universidad debe seguir siendo el lugar social de la verdad, donde se cultivan el arte , la ciencia y las humanidades sin segundas intenciones y tienen que ser no museos de pensamiento, deben ser casas de pensamiento, de reflexión; junto con esto, segundo, hay una pluralidad y una diversidad, cuando en la universidad todo el mundo piensa igual da la impresión de que el mundo se detuvo, entonces hay que abrir el espectro los 360 grados y las ocasiones que haya que darle las vueltas para poder seguir perfeccionándolo.

Tercero, que la misión académica, docencia , investigación, difusión de cultura, sigue siendo la esencia y nada vale más que hacer la esencia.  Entonces hay que introducir procesos para buscar excelencia y pertinencia en docencia, en investigación, en extensión y difusión de la cultura; cuarto, que hay que construir un concepto de comunidad y eso es muy difícil porque las personas o tienen diferentes antecedentes o tienen rutinas, o no logran tener el efecto colectivo de esa comunidad, están muy metidas en sus carreras, en sus posgrados y en sus proyectos, y hay que tener todo eso; el siguiente es que hay que estar abiertos a la sociedad y rendir cuentas, la universidad no puede ser un espacio auto contenido.

Hace años recuerdo que Richard Ernst , que fue premio Nobel de Química y fue el que desarrolló todo el tema de la resonancia magnética, presentó hace años en una reunión algo que se me grabó mucho y era el sistema universitario asomándose de una escalera en un castillo y volteando al exterior. La universidad tiene que tener esa mirada exterior y su mirada interior y, en ocasiones, sobra la mirada interior y se hace poco hacia el exterior. Entonces, como diría uno de los grandes rectores de Guanajuato: “Toda casa de estudios debe ser como un resonador potente que registre las más pequeñas vibraciones que provienen de todos los rumbos del destino del hombre”, es una caja de resonancia , es una frase de Armando Olivares Carrillo, el gran rector de Guanajuato que transformó el Colegio del estado en Universidad.  De ahí en adelante, que es muy importante la visión internacional, la cooperación interinstitucional, que no hay universidad que logre todo en el mundo, que siempre hay que estar abiertos y además entender, abiertos a  cooperar con todas las demás universidades y entender que todo el espacio social es un espacio educativo, la empresa puede ser una prolongación de la universidad, el sindicato, la cooperativa, cualquier organismo de la sociedad se convierte en un espacio educativo, entonces es muy difícil en una sola expresión resumir un aprendizaje tan grande.

También es que siempre hay que ir pensando en rediseños institucionales, siempre hay mejores maneras de organizar la vida académica, organizar la propia administración, nunca habrá la universidad que tiene todo resuelto, es un proceso de aproximaciones, Borges señala que la duda es uno de los signos de la inteligencia, entonces en la medida en que las sociedades piensen, duden, se rediseñen, se comprometan vamos a cumplir todas.

¿Cuáles son las repercusiones que tendrá la reducción del presupuesto en materia de ciencia y tecnología y, cómo puede protegerse dicho presupuesto?

Es una situación lamentable, por más problemas financieros que tengamos hay por lo menos tres programas de Conacyt que históricamente se han protegido, 1)el de ciencia básica, 2)el de Sistema Nacional de Investigadores y, 3)las becas. Casi nunca en la historia del Conacyt, desde 1970 y conforme se fueron creando los programas ha habido esas reducciones, es un error es una inhabilidad de insensibilidad por parte de la Secretaría de Hacienda y, eventualmente, del propio Conacyt por permitir eso. No se puede decir que no hay dinero, sí lo hay, hay que distribuirlo y hay que pensar en las soluciones, se tiene que consolidar el posgrado nacional, tiene que haber más becas. En mi época al frente del Conacyt me preguntaban, ¿Cuántos se quedan fuera?, mi respuesta era nadie, porque los programas del PNPC, mientras se tengan los cumplimientos académicos, todo mundo tiene beca, además incorporamos a alumnos provenientes de otros países. Yo deseo que encuentren soluciones porque no hay excusa que valga.

¿Esta reducción podría traducirse como una carencia de visión de Estado?

La ley de Ciencia y Tecnología establece de manera muy clara que se debe tener una política de Estado y, en efecto en una política de Estado hay cosas que no se pueden sacrificar. No se puede sacrificar la educación, la ciencia, la cultura, la tecnología la innovación y quien actúe en otra dirección carece de visión estrategia y carece de oficios de sensibilidad política para actuar. La palabra responsabilidad viene de la palabra respuesta entonces no hay justificación alguna y aún con los retos financieros que estamos enfrentando me consta que sí hay dinero, hay que saber distribuirlo y aplicarlo.

Nos vamos de vacaciones, no sé si justas pero si necesarias, regresamos en Agosto y recuerden “Si transformar la realidad educativa del país es una utopía lo único cierto es que es realmente posible

*Dr. en Educación. Profesor-Investigador de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

 

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