POR ARMANDO VALERDI
Si tratamos de entender lo que hoy vivimos con la misma percepción de mirar al mundo como lo hemos visto hasta hoy, va a ser prácticamente imposible que podamos interpretar los acontecimientos actuales y futuros que darán rumbo a la humanidad, y por lo mismo nuestras decisiones tomaran el rumbo equivocado.
Al respecto, en el comentario de hoy me enfocare más en el comportamiento humano que en los datos fríos a los que a veces me refiero, que realmente se vuelven calientes cuando los humanos interferimos en ellos, tomando en cuenta como lo he mencionado varias veces, que la economía y las finanzas se mueven más por las emociones que por la razón.
Al respecto del comportamiento humano, que cada vez parece más complicado entender, recientemente comencé a escuchar varios comentarios sobre la película Joker que en español lo conocemos como “Guasón”, uno de los super villanos del super héroe Batman. Los comentarios que escuche sobre la película resaltaban diferentes tópicos pocas veces vistos en este tipo de filmes, lo que me atrajo ir a verla.
La película es interesante porque realmente toca aspectos que un film de super héroes o super villanos normalmente no abordan, sobre todo como dice Zygmunt Bauman, al regreso de la idea hobbesiana de crueldad innata en las personas.
Al respecto veamos para abundar en el analisis un comentario realizado por Michael Moore, que inicia con el título de, «El miedo alrededor de Joker es una distracción para no ver la verdadera violencia que nos está desgarrando».
Moore agrega, que al tiempo que Joker se establece como uno de los grandes estrenos del año, también se sitúa al centro de las controversias. Ya que algunos han dicho que es problemática y que romantiza la violencia, pero otros aseguran que es una película necesaria. Esta película, que no es para niños, el mes pasado ganó el gran premio a la mejor película del Festival internacional de Venecia.
Moore advierte que Joker es una película de la que todos los estadounidenses han oído hablar y que deben temer y mantenerse alejados. Se ha dicho que es violenta, enferma y moralmente corrupta, una incitación y celebración del asesinato. Menciona que Estados Unidos está en una situación de desesperanza, la Constitución está hecha pedazos y un maníaco imprudente en Queens, (en referencia a Donald Trump), tiene acceso a códigos nucleares, pero por alguna razón, deberíamos estar asustados de esta película.
Por su parte Todd Phillips, Director de Joker dijo: “No puedes culpar al cine por un mundo que está tan jodido que cualquier cosa lo puede destruir”. Joker no es una película de superhéroes, supervillanos ni de cómics. Está situada en algún punto entre los años 70 y 80 en la ciudad de Gotham, y los cineastas no intentan disfrazar la ciudad por otra cosa que lo que es: la ciudad de Nueva York, el cuartel central de todo lo malo, la de los ricos que nos gobiernan, de las corporaciones a las que servimos, y de los medios que nos alimentan con las noticias sin profundidad que ellos creen que tenemos que absorber.
Otro comentario interesante acerca de Joker lo hace Óscar Constantino Gutiérrez en el Observatorio Ciudadano, y que titula “Joker”, cuando la sociedad crea a sus monstruos. ¿Por qué “Joker” ganó el León de Oro del Festival de Venecia? La cinta es un producto redondo, pero sobresale por su narrativa y significado: es una película inteligente que reta al espectador, que le obliga a pensar en los cotidianos que suele preferir ignorar.
En el comentario Óscar Constantino, resalta la película de Todd Phillips que hace recordar una línea de “At first sight” (Irwin Winkler, 1999), cuando Virgil, quien acaba de recuperar la vista, pregunta por qué la gente ignora a los menesterosos en la calle, la respuesta es que la gente decide no ver ciertas cosas, tienen ceguera selectiva. También destaca otra influencia de “Joker” es “The Man Who Laughs” (Paul Leni, 1928) y se nota: la cinta expone la ceguera general frente a las enfermedades mentales y la existencia de una cultura del bullying que algunos torpemente insisten en disculpar o en subestimar su gravedad. Si bien otra de las referencias de Phillips fue “The Killing Joke” (Moore y Bolland, 1988), el director refuta una tesis planteada por el “Joker” en ese cómic: para volverse loco (delincuente o psicópata) no basta un mal día, el vaso se derrama por una gota, pero se llenó porque constantemente cayeron gotas previas. Phillips desvela detonantes que, si bien no justifican a los anarquistas o reclamantes violentos, explican la furia y venganza de los participantes en disturbios y manifestaciones delictivas.
Un mensaje central de “Joker” es que la sociedad crea a sus monstruos. La colectividad agrede a los débiles y diferentes, sin esperar que los afectados reaccionen. Se parecen al sujeto abusivo que patea a un perro y luego se indigna porque el animal le arranca una pierna, harto de tanto maltrato.
Sin duda ambos comentarios son precisos en aspectos que muestran a una sociedad intensamente emocional, temerosa y confundida, que muestra sus emociones en la polarización de las ideas y de la agresividad humana endémica, que se traduce una y otra vez en una propensión a la violencia como menciona Bauman.
Como podemos ver la película toca aspectos que muestran que los retos son enormes para el mundo actual, por lo que hay que buscar que el dialogo y la cordura se reintegren a esta humanidad confundida.
Gracias
Deja una respuesta